El legado de
Taisen Deshimaru
De una u otra forma gracias al maestro Taisen Deshimaru hemos podido conocer y practicar la meditación zen. La semilla que dejó florece hoy día en forma de distintas expresiones de su enseñanza, la creación de distintos dojos y centros de meditación, la proliferación de su enseñanza encarnada en la figura de sus discípulos más cercanos, los cuales han seguido exactamente el zen transmitido por su maestro san fe de ello.
Taisen Deshimaru
(1914 – 1982) Es patriarca fundador del Zen en Europa.
Llegó a Francia en 1967 y durante 15 años transmitió la práctica de zazen a miles de discípulos, fundó numerosos dojos y grupos de zazen, así como el gran templo de la Gendronnière y la Asociación Zen Internacional (AZI). Además, tradujo y comentó numerosos textos clásicos del zen.
Falleció el 30 de abril de 1982 confiando a sus discípulos la misión de desarrollar y transmitir la práctica del zen Soto en Occidente.


RAPHAËL DOKO TRIET
Abad del templo Seikyuji y maestro de nuestra comunidad de practicantes
A los veintiún años empieza a practicar zazen (meditación zen). El Maestro Taisen Deshimaru le ordena monje en 1973. Preside el dojo de París de 1990 a 1997 y la Asociación Zen Internacional (AZI) de 2004 a 2013. En 1997 recibe la transmisión del Dharma del maestro Yuko Okamoto, amigo del maestro Deshimaru. Ese mismo año crea el dojo de Lisboa.
Raphaël dirige sesshines en numerosos países, especialmente en España, Portugal, Francia, Québec y Suecia, así como en los templos de Seikyuji (del cual es abad) y de la Gendronnière, del que ha sido el tercer abad de 2012 a 2015.
José Luis KôKon
Responsable del dojo zen de Utrera
José Luis Villalonga, natural de Utrera, comenzó la práctica de la meditación zen en el año 2005. En el año 2008 recibió la ordenación de bodhisattva y junto con un grupo de amigas y amigos creó el primer grupo de meditación en Utrera aquel mismo año. Posteriormente, en el año 2011, recibió la ordenación de monje zen de su maestro Raphaël Doko Triet, con el que practica habitualmente en los retiros de meditación que se organizan en el templo Seikyuji.

A lo largo de toda su historia los linajes han evolucionado unos junto a otros, lo que prueba una gran intimidad, una ayuda fraterna, recíproca y desinteresada. Aunque la gente esté de un lado o de otro, por todas partes los patriarcas han transmitido el zen. Los demás no han producido más que ramas secas.